El Stretching Tailandés fué llamado en sus orígenes Stretching Hindú y es una de las técnicas de masaje más antiguas que se conocen. Es originaria de los monasterios hindúes, y nació como terapia para estirar y equilibrar el cuerpo después de permanecer muchas horas sentados en la misma postura. Este masaje cubre las cadenas musculares anterior, posterior y lateral de nuestro cuerpo.

El Stretching Tailandés consta de más de 100 movimientos conectados entre sí que proporcionan un masaje al cuerpo de manera global. Todos los movimientos están inspirados en las asanas (posturas) de Yoga y, que como ellas, buscan la apertura física, sensorial y energética, así como la relajación profunda de todo el cuerpo basándose en dos premisas esenciales: la respiración y la consciencia.

Tras la sesión ((1h 30 minutos aprox. de duración) la sensación es muy placentera. Es una invitación a mejorar el conocimiento y conciencia del propio cuerpo.

Los beneficios que nos aporta esta técnica son:

• Desarrolla la flexibilidad de los músculos, ligamentos y tendones.
• Beneficia la movilidad de las articulaciones.
• Mejora la capacidad respiratoria.
• Incrementa nuestra energía vital, disminuyendo la fatiga.
• Aumenta la concentración y la capacidad sensorial.
• Favorece la relajación física y mental, disminuyendo el estrés.
• Mejora el funcionamiento de los órganos internos.